Pavón

Se trata del socio número 1 y fundador de la peña junto a históricos como Joan Latorre y otros que provenían de la Penya Sales. De aquello hace tanto tiempo que las ruedas de las bicicletas todavía no las hacían redondas. La sonrisa siempre acompaña su rostro y recordados son algunos de sus chistes, como el del pájaro uyuyuyuy… Ganador de su primera Challenge en 1976, o lo que es lo mismo, hace 36 años, repitió en el 84 y desde entonces siempre ha estado en las posiciones cabeceras y llevándose alguna clasificación secundaria como las metas volantes.

Cuentan las crónicas que sus ojos azules eran el terror de las chavalas de la época, aunque él sólo tenía ojos para las bicicletas… de vez en cuando.

También conocido como el del lomo muy hecho en los restaurantes, se defiende bien en todos los terrenos, siendo su punta de velocidad su característica más acentuada. Su peor momento fue cuando se rompió el codo en una caída, pero eso no le hizo aparcar su pasión, que también extiende a la mountain bike.

Gran deportista, pues ha practicado también futbol, frontón y squash, a sus 56 años sólo piensa en pasarlo bien sin marcarse nuevas metas. Prefiere los plátanos como fuente de energía, pues las barritas "son una mariconada", y mucho mejor un cubata que cualquier bebida isotónica.

Recuerda con especial nostalgia el camino de Santiago que hizo con dos amigos y asegura que tras tantos años no se ve con otro maillot que no sea el azul y blanco de la Peña Egara.